Escapando de los rayos de sol me refugio en las sombras.
Te regale mis abrazos, mis besos, mi vida.
Dicen que el amor es suficiente, pero tu me haces llorar.
Me dices vuelve... mi corazón dice si, pero mi mente obliga
a mis pies a correr hacia la sombra.
La sombra de mi refugio.
La calma de mi espíritu.
Y en esta calma encuentro el remanso donde te escribo poemas.
Donde sin pensar me dejo llevar.
Donde sin querer te amo incondicional.
Donde.... por un momento no me duele.
Donde me vuelves a hacer sonreír.
Donde sin disimular mientras suena una guitarra me acaricias
y sin palabras me dices te quiero.
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